Vete,huye de mi presencia acomplejada,de mis abrazos reconfortantes en escarcha masacrada,escondete en tus adentros adinerados,en tu silencio embravecido por la locura,por la cordura de no ser normal,de encontrar en otro la ausencia de no mirar atrás,de entristecerse por cada palabra salida de tu boca,de mi efusivo y desquiciante caminar.
Perdoname por no querer seguir igual,por haberme lastimado a mi mismo,por haber sido egoista al pensar en todos menos en mi,por sufrir el silencio de mi pesadilla,perdoname por no quererte nunca más,porque tu y solamente tu,fuiste el causante de lo ocurrido.
A ti te maldigo,sufrimiento desconsiderado,hiciste de mi y la mujer que amo,un simple chiste en tu cuento desgraciado,la volviste un fantasma siendo ella la estrella más luminosa de todas,y en mi caso,llegaste incluso a cambiarme,me hiciste perderla por mi simple sentimiento de victicismo desacomplejado,me provocaste daño cuando debia haber disfrutado de ella,de sus delicioso gestos amueblados,de encontrar en sus palabras el poder desahogarme de tu vil estratagema.
Se que ya no soy lo que era,pero por ella hablare al mundo de su proeza,de como se hizo fuerte mientras el bien flogea,y yo,de nuevo,me he vuelto el vagabundo de su estrella,esperando poder ver un nuevo amanecer con ella.
Huye bastardo,sufrimento desconsiderado,que has hecho de mi vida,la promesa de una venganza,vete y nunca vuelvas.
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