Mi cantar,el suave roce de tu piel al despertar,un paseo por la Roma occidental,kilómetros y kilómetros de conversación genial, una sonrisa perfecta cuando te miro de cerca y la mas dulce de las comedias llega sin avisar porque sabe que el humor se ha vestido de gala para regalarte su mayor deleite profesional.
Abriendo los ojos después de un fin de semana espectacular, la bandera italiana aún no deja de ondear por mi memoria sideral, su comida todavía persiste en huir de poder olvidar e intercambiar su sabor por el de un día normal, una casa donde llegar a sudar para llegar al destino final, personas agradables con quien estar pero solo una destaca entre las demás, mujer de armas tomar,dulce en cualquier realidad y un sin fin de oportunidades con las que poder disfrutar de su presencia angelical.
Un beso de buenos días,una mirada respondida con una caricia, unas palabras para reconfortar el mal sueño de una noche pasada en soledad,sin mas apego que una cama vacía y el pensamiento de un hombre con el deseo de llegar el día.
Una rutina genial, caminatas aquí y allá, monumentos que despiertan mi curiosidad,y a mi lado esta la princesa de la roma imperial, sin apenas maldad,con excesiva humanidad, empatía en cualquier aspecto que mencionar,porque la verdad es que solamente ella es dueña del mayor regalo que le pueda dar,mi afecto y cariño incondicional.
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